Fuente: La Voz del Río
Emerson Lares/Opinión
Foto: AP/infobae.com
Policía Nacional de Ecuador lanza la parada golpista en Quito
Primer sospechoso internacional: gobierno imperial de EE. UU

30 de septiembre pasará a la historia de América del Sur, como el día que la Policía Nacional de Ecuador lanza la parada golpista en Quito, disfrazando una protesta institucional por reivindicaciones salariales; que en la misma mañana de este jueves 30, el Presidente Rafael Correa Delgado, denunció como “un intento de golpe de estado” en contra del gobierno que él preside. Su iniciativa para dialogar con miembros policiales fue frustrada, al ser lanzada una bomba lacrimógena a la cabeza del mandatario ecuatoriano.
Prácticamente, secuestrado en el Hospital de la Policía Nacional (HPN), en todo el transcurso del día y la noche (Hasta las 9:59 p.m HLV), mantuvieron al Presidente Correa, incomunicado con el resto de su pueblo. Luis Ernesto González, Jefe del Comando Conjunto de la FF. AA, a media mañana se dirigió por Teleamazona, Tv local, en imágenes recogidas por TeleSur, espuso a grandes rasgos los preparativos que gestaban las fuerzas bajo su mando. Las acciones se comenzarían desarrollar en las primeras horas entrada la noche sureña de la capital ecuatoriana: Quito.
En la hora afortunada para América del Sur 9:29 p.m hora de la República de Ecuador, el palacio presidencial Carondelet, recibió al Mandatario Constitucional Rafael Correa, líder fundamentar de la revolución ciudadana, en un discurso entrecortado por la dificultad al respirar, el mismo Correa acusó “al expresidente Lucio Gutiérrez”, antecesor suyo en el cargo “de impulsar la sublevación de los policías... pronto se descubrieron los verdaderos motivos... miserables de la oposición”, que señaló a un numeroso grupo de personas apostadas frente al palacio de gobierno.
El cierre de canales de televisión, cierre de los aeropuertos de la nación, la protesta desde el día de ayer (Miércoles 29) que nadie entendió las causas reales, la continua dificultad de la guardia presidencial, en no permitirle ejercer la protección del presidente y, sobre todo, la intensión manifiesta de reprimir al pueblo ecuatoriano para que no llegaran al HPN, a rescatar a su líder Rafael Correa; lleva a comprender la magnitud del golpe de estado que se montó en Ecuador.
Finalmente, Correa, desde el salón amarillo a las 11:20 p.m HLE prometió: “no olvidar... y llevar hasta las últimas consecuencias” las investigaciones que se deban hacer; además informó que serían cerca de 27 miembros de las fuerzas especiales los heridos. Luego, confirmaría “la muerte de un policía”... Sgto. Roland Carreño; calificando este hecho como “una tragedia".
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Policía Nacional de Ecuador lanza la parada golpista en Quito
Primer sospechoso internacional: gobierno imperial de EE. UU

30 de septiembre pasará a la historia de América del Sur, como el día que la Policía Nacional de Ecuador lanza la parada golpista en Quito, disfrazando una protesta institucional por reivindicaciones salariales; que en la misma mañana de este jueves 30, el Presidente Rafael Correa Delgado, denunció como “un intento de golpe de estado” en contra del gobierno que él preside. Su iniciativa para dialogar con miembros policiales fue frustrada, al ser lanzada una bomba lacrimógena a la cabeza del mandatario ecuatoriano.
Prácticamente, secuestrado en el Hospital de la Policía Nacional (HPN), en todo el transcurso del día y la noche (Hasta las 9:59 p.m HLV), mantuvieron al Presidente Correa, incomunicado con el resto de su pueblo. Luis Ernesto González, Jefe del Comando Conjunto de la FF. AA, a media mañana se dirigió por Teleamazona, Tv local, en imágenes recogidas por TeleSur, espuso a grandes rasgos los preparativos que gestaban las fuerzas bajo su mando. Las acciones se comenzarían desarrollar en las primeras horas entrada la noche sureña de la capital ecuatoriana: Quito.
En la hora afortunada para América del Sur 9:29 p.m hora de la República de Ecuador, el palacio presidencial Carondelet, recibió al Mandatario Constitucional Rafael Correa, líder fundamentar de la revolución ciudadana, en un discurso entrecortado por la dificultad al respirar, el mismo Correa acusó “al expresidente Lucio Gutiérrez”, antecesor suyo en el cargo “de impulsar la sublevación de los policías... pronto se descubrieron los verdaderos motivos... miserables de la oposición”, que señaló a un numeroso grupo de personas apostadas frente al palacio de gobierno.
El cierre de canales de televisión, cierre de los aeropuertos de la nación, la protesta desde el día de ayer (Miércoles 29) que nadie entendió las causas reales, la continua dificultad de la guardia presidencial, en no permitirle ejercer la protección del presidente y, sobre todo, la intensión manifiesta de reprimir al pueblo ecuatoriano para que no llegaran al HPN, a rescatar a su líder Rafael Correa; lleva a comprender la magnitud del golpe de estado que se montó en Ecuador.
Finalmente, Correa, desde el salón amarillo a las 11:20 p.m HLE prometió: “no olvidar... y llevar hasta las últimas consecuencias” las investigaciones que se deban hacer; además informó que serían cerca de 27 miembros de las fuerzas especiales los heridos. Luego, confirmaría “la muerte de un policía”... Sgto. Roland Carreño; calificando este hecho como “una tragedia".
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